¡…y Atila volvió a pasar por el Bernabeu!

…y un vándalo le pisó la mano a Messi 

cuando estaba tendido sobre el césped.

El Barça (2) le explicó al Madrid (1), una vez más, como es eso de jugar a fútbol.

El ‘guapo’ Ronaldo marcó a los once minutos y Puyol y Abidal remontan 

en la segunda parte con una lección azulgrana de posicionamiento en el campo.

El Barcelona ha vuelto a ganar en el Santiago Bernabéu. El buen fútbol, el control del balón, la elegancia, vuelve a castigar con la derrota al planteamiento rácano de José Mourinho y el juego sucio de Pepe. El primer gol del encuentro de Cristiano Ronaldo quedó olvidado al final del encuentro, tras una remontada mágica con goles de Puyol y Abidal, un gran encuentro de Alexis Sánchez e Iniesta y un pase magistral de Messi. Un emocionante clásico no exento de polémica ante la extrema dureza del Madrid y un antideportivo Pepe que pisó la mano de Messi en una nueva muestra de antideportividad.

Son tantos clásicos que la capacidad de sorpresa se reduce, pero el Barça lleva ocho partidos consecutivos sin perder en el Bernabéu. Las circunstancias hicieron que José Mourinho intentase innovar y situar un autobús defensivo para frenar la creación de juego del Barça. Apostó por el equipo más afín a sus ideales. Con su guardia pretoriana en el campo. Recuperando a Ricardo Carvalho que no jugaba desde septiembre. Apostando por Altintop como lateral. Pepe en la medular. Un planteamiento que no dio resultado. Por el contrario, Guardiola volvió a ser fiel a un estilo y a su forma de entender el fútbol. Se permitió dar minutos a Cuenca en los últimos minutos del partido, en una muestra más de su apuesta por los jugadores de la cantera. Pinto en la portería. Todo un principio de lealtad. Con Alexis de falso nueve. Igual de brillante.

UN EQUIPO MENOR

Nacía una batalla para el Real Madrid. Un partido para disfrutar para el Barcelona. Adueñado del balón desde el primer segundo. Con un rival repitiendo el mismo concepto que aquella semifinal de Liga de Campeones. Encerrado en su terreno. Como si de un equipo menor se tratase. Pero con tres puntales capacitados para destrozar a cualquiera: Cristiano, Higuaín y Benzema. Pero no al Barcelona.

Fue el día en el que Cristiano se quitó de un plumazo su ansiedad en los clásicos, con un primer gol. Pero no fue suficiente. A los once minutos rompió la baraja. A toda velocidad. Con un pase al espacio de Benzema. Aprovechando el agujero que dejó Dani Álves para romper con una bicicleta a Piqué y superar por bajo con un potente disparo a Pinto. Un error. Pero quedaba mucho partido.

MOURINHO VENCIDO

Fue Alexis el encargado de enloquecer a la zaga blanca. Con Ramos multiplicándose ante las carencias de sus compañeros y Casillas salvador. Le sacó una a Iniesta abajo. Otra para ver repetida a Messi pegada al palo. Y siempre con el factor suerte de los postes. El travesaño repelió un testarazo de Alexis. El plan de Mourinho se tambaleaba pero el equipo blanco se mantenía todavía en pie. Y eso que Pepe parece obsesionado con ensuciar la imagen del Real Madrid. Una nueva patada a destiempo. Un pisotón a Busquets le hizo jugar condicionado por una tarjeta 67 minutos. No hubo más noticias para Pinto. Abidal estuvo salvador en los momentos en los que sus compañeros perdían un balón y se encontraban con una contra antes de darse cuenta.

La sinfonía azulgrana funcionaba. Solo le faltaba afinar el remate. Iniesta, que dejaba en evidencia a Altintop, perdonó otra clara ante Casillas. Un mal control le condicionó. Chutó con la zurda al lateral de la red. A Guardiola se le veía tranquilo. Sabía que el gol tenía que llegar. Y lo hizo de la forma menos pensada. El equipo de los bajitos marcó a balón parado. Nada más iniciarse la segunda parte un despiste en la marca de Pepe lo aprovechó Puyol. Un testarazo a la red con la potencia con la que marcó a Alemania para meter a España en la final del Mundial. Inapelable. Descolocó al Real Madrid. Aturdido. Encerrado en su terreno y apunto de caer derribado.

LA VERGÜENZA DE PEPE

La imaginación de Cesc e Iniesta se asoció. Pase picado y remate en carrera. De nuevo el poste salvó a Casillas. Mourinho debía actuar. En su banquillo tenía a Marcelo, Özil o Callejón. Mientras pensaba, Benzema dejaba un remate para levantar el ánimo al Bernabéu. Un centro de Altintop lo estrelló en el poste de Pinto.

Fue cuando Mourinho se decidió a cambiar y recuperar su dibujo. Regresó a un 4-2-3-1 con la entrada de Özil y Callejón. En pleno show de Pepe. Exagerando acciones en las que no le tocaban y repartiendo a destiempo. Fingió un manotazo en la cara de Cesc. Pisó la mano de Messi cuando estaba en el suelo, mirando al argentino en el suelo decidió clavarle el taco en la mano. Una imagen para el mundo.

Cuando se afeaba el duelo, el fútbol salió premiado. En la noche de Alexis apareció Messi. Como siempre lo hace en partidos decisivos. Picó el balón al desmarque de Abidal que controló con el pecho y chutó cruzado. El gol de un lateral a domicilio. El fiel reflejo de una superioridad azulgrana que alimenta la obsesión blanca. Ni con planteamientos valientes, ni con ultra defensivos puede a su eterno rival.

Ficha técnica:

1 - Real Madrid: Casillas; Altintop, Sergio Ramos, Carvalho, Coentrao; Pepe (Granero, m.80), Xabi Alonso, Lass (Özil, m.66); Higuaín (Callejón, m.66), Cristiano Ronaldo y Benzema.

2 - Barcelona: Pinto; Álves, Piqué, Puyol, Abidal; Busquets, Xavi (Thiago, m.86), Iniesta; Cesc (Cuenca, m.88), Messi y Alexis (Adriano, m.82).
Goles: 1-0, m.11: Cristiano. 1-1, m.49: Puyol. 1-2, m.76: Abidal.

Árbitro: Muñíz Fernández (comité asturiano). Amonestó a Pepe (17), Coentrao (60), Callejón (68) y Carvalho (87) por el Real Madrid; y a Piqué (20), Busquets (55) y Puyol (79) por el Barcelona.

Incidencias: encuentro de ida de los cuartos de final de Copa del Rey, disputado en el estadio Santiago Bernabéu, lleno, con la presencia de 83.500 espectadores.

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